Dar para Recibir

“Hay más felicidad en dar que en recibir” (Hechos 20:35).

Dicen que hay mas placer en dar que en recibir y es entendible que a algunas personas les resulte difícil entender esto.

Es una referencia que se encuentra no solo en la Biblia, sino en muchos libros laicos, porque definitivamente es un principio que funciona.

Los avaros tienden a querer acapararlo todo, buscando amasar fortuna. Y, sin embargo, viven una vida miserable.

Los bienes cuando se acumulan, semejan a un manantial de agua cristalina que deja de correr, que se estanca. Por ende, se contamina y toda la vida que contiene muere paulatinamente. Pero cuando damos, todo fluye, la vida se renueva y hacemos espacio para cosas nuevas y mejores.

La felicidad que produce dar es incomparable. Ver una cara iluminada de felicidad porque otro ser humano ha tenido un detalle, no tiene precio.

Ahora bien, el secreto es que la dadiva debe ser desinteresada. Si se espera algo a cambio, si se da por motivos mezquinos, no funciona. Es necesario dar con desapego y confiando en que la vida se encargara de retribuirnos de algún modo.

Muchas veces la retribución viene a través de alguien más o simplemente se nos resuelve una situación a la que no encontrábamos salida. De algun modo somos bendecidos de manera inexplicable.

Increíblemente, muchas personas van por la vida arrebatando. Y es posible que lleguen a acumular bienes. Pero si analizamos sus vidas detenidamente, es probable que detectemos que el bienestar no se traduce a todos los aspectos de sus vidas.

Todos tenemos algo que dar. Una sonrisa, una palabra de animo, un consejo.

Limpia tu closet y saca esa blusa que no te pones hace meses o esos zapatos que te incomodan. Revisa los cajones de tu comoda y dona esas cosas que no usas. Reduce la pila de juguetes de tus hijos, para que hagamos a otros chicos mas felices. Es como hacer profilaxis mental, mientras ayudas a otros.

Es tan grande la diferencia que podemos hacer si todos damos algo positivo a las personas que se encuentran en nuestro entorno cada día. Y al final, los mas beneficiados somos nosotros mismos.